Bendito sea Dios. El que nos conforta en toda prueba, para que también nosotros seamos capaces de confortar a los que están en cualquier dificultad
El que entre ustedes quiera ser grande, deberá servir a los demás; y el que entre ustedes quiera ser el primero, deberá ser su esclavo. Porque, del mismo modo el hijo del hombre no vino para que le sirvan sino para servir
No son ustedes los que me han elegido, soy yo quien los ha elegido y los ha destinado para que vayan y den fruto y su fruto permanezca.
Ya no los llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su amo; a ustedes los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que le he oído a mi Padre.
Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, vuestro Padre celestial también os perdonará a vosotros
Mi reino no es de este mundo; si mi reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos; pero mi reino no es de aquí.
Pon aquí tu dedo, y mira mis manos; y acerca tu mano, y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente
Busqué en el Señor y él me oyó, Y me libró de todos mis temores. Los ojos del Señor están sobre los justos, Y atentos sus oídos al clamor de ellos
Y el Dios de toda gracia, que te llamó a su gloria eterna en Cristo, después de haber sufrido por un poco de tiempo, te restaurará y te hará fuerte, firme y constante.
Los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu. 6 El ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz